La donación es el gesto solidario por el que una persona decide donar un órgano, con el convencimiento de que este órgano ayudará a alguien que lo necesite. El trasplante es el procedimiento mediante el cual se implanta en el receptor un órgano o una determinada cantidad de tejido que proviene de un donante. Podemos distinguir entre dos grupos de trasplantes: de órganos (riñón, hígado, pulmones, páncreas, corazón, hueso, intestino, etc.) y de tejidos (médula ósea, células endocrinas, córnea, piel y tejido osteotendinoso).
¿Quién puede ser donante?
Teóricamente, cualquier persona que en vida no se haya manifestado en contra puede ser donante de órganos y de tejidos.
En principio no hay límite de edad, pero es necesario que la muerte cerebral del donante se produzca en el hospital, en una UCI móvil o en una ambulancia medicalizada para que se puedan hacer todas las pruebas y conservar adecuadamente los órganos.
La muerte cerebral o muerte encefálica es el cese irreversible de todas las funciones cerebrales, lo que supone la muerte de la persona. El diagnóstico médico legal de la muerte cerebral o muerte encefálica está actualmente regulado en el anexo 1 del Real Decreto 2070/1999, de 30 de diciembre de 1999.
El proceso de donación se inicia con las constataciones legales estipuladas después de haberse producido la muerte del individuo por cese definitivo de las funciones cardiorrespiratorias o encefálicas. Cuando esto tiene lugar es cuando se pueden conservar artificialmente los órganos del cuerpo para trasplante.
La confidencialidad es absoluta durante todo el proceso y se garantiza a fin de favorecer la salud o las condiciones de vida del receptor.
Proceso de donación
Si te planteas la posibilidad de ser donante, lo único que necesitas hacer es comunicar esta decisión a su familia o las personas más próximas, ya que serán ellos los primeros en ser consultados.
Si observa reticencias, argumente la firmeza de su decisión. Debe esperar que, llegado el caso, respetarán su voluntad. En un futuro próximo podrá hacer constar el deseo de ser donante en el documento de últimas voluntades.
Lo más importante es que la familia conozca este deseo, porque es con las personas más próximas, con quien hablarán los profesionales sanitarios. Las familias dan cumplimiento a la voluntad de la persona muerta si saben cuál era esa voluntad. Este conocimiento facilita mucho que decidan hacer la donación, y hasta puede ser reconfortante, en un momento tan doloroso, saber que la muerte de quién amaban no ha sido inútil sino que proporcionará vida a otras personas.
Recuerda
Si decide hacerse donante, rellene los datos del carné de donante. Los menores de 18 años deben tener la autorización de los padres o los tutores legales.
Comente con la familia su decisión, especialmente con las personas más próximas.
Lleve encima siempre el carné de donante.
Anime a otras personas a hacerse donantes.
Todos podemos enfermar y necesitar un trasplante.
Puedes consultar más información y aplicar para el carné de donante de órganos en la página web de la OCATT (Organització Catalana de Trasplantament).
